El futuro digital de la salud
El futuro digital de la salud
En el último año, dadas las condiciones proporcionadas por la pandemia, en el mundo ha crecido el uso de la tecnología digital. En el área de la salud, la tecnología digital tiene la capacidad de marcar la diferencia en la prestación de servicios, optimizando la atención a los pacientes, al tener el potencial de transformar la investigación y el desarrollo de tecnologías de salud.
En este contexto, en el sector de la salud se han evidenciado avances frente a la utilización de la tecnología y una creciente adopción de soluciones digitales; sin embargo, continúa existiendo un rezago con respecto a otras áreas y se evidencian obstáculos para la atención médica digital en la región.
Es por esto que, el pasado lunes 3 de mayo desde FIFARMA, en alianza con ISPOR, se llevó a cabo el webinar “El futuro digital de la salud”, que reunió a Luis Tejerina, especialista líder en la división de Protección Social y Salud del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y Víctor Zamora, exministro de salud de Perú, con el fin de discutir el potencial de las soluciones digitales para transformar la atención en salud en la región y los obstáculos que siguen presentes, impidiendo la adopción y adaptación de la tecnología digital.
Hoja de ruta
Es de resaltar que, la salud digital más que una opción conveniente, se ha configurado como una alternativa para brindar una atención efectiva a los pacientes y minimizar la exposición al COVID-19; “todos los países, incluyendo Perú, han visto en la salud digital un elemento poderoso para restablecer los servicios que fueron detenidos por el impacto de la pandemia”, como comentó Víctor Zamora.
En ese sentido, entre los diferentes aspectos que aportan al éxito de un futuro digital de la salud, Luis Tejerina destacó: “creemos que el éxito depende de una visión multidimensional en el desarrollo de la salud”; en esta visión se incluyen las asociaciones público – privadas, al tener el potencial de promover la innovación y la inversión en pro de la digitalización y el cierre de brechas de acceso tecnológico.
Perú es un ejemplo de iniciativas que se están impulsando en ese sentido, con una hoja de ruta en implementación para la agenda digital de salud 2020-2025. Esta agenda se orienta por cuatro objetivos: fortalecer el ecosistema de la salud y su gobernanza, desplegar a nivel nacional la historia clínica electrónica y la telemedicina, mejorar la confiabilidad y disponibilidad de la información y promover la maduración, el desarrollo y la innovación tecnológica. Eso se pretende con base en una estructura que tiene en cuenta tanto a las personas y a la cultura, como a la gobernanza nacional.
Transversalmente, es de recalcar la importancia de la innovación, la cual permite una rápida adaptación a cualquier cambio del entorno, permitiendo evolucionar en la investigación, prevención y tratamiento de enfermedades, para proteger la vida de los pacientes.
Obstáculos
Por otro lado, dadas las condiciones derivadas de la pandemia, en los próximos años habrá una situación fiscal complicada, por lo que los proyectos en el marco de la transformación digital deben estar diseñados correctamente, de lo contrario pueden significar un desperdicio de recursos, como lo explicó el especialista del BID, “la decisión es quedarnos en el status quo o dar un salto de transformación digital; la tendencia es que los países están pensando en dar el salto, pero si se da el salto, se tiene que dar bien”.
Otro de los obstáculos que captan la atención, refiere a la conectividad; a partir de esto, Víctor Zamora destacó que, “tenemos que dimensionar el grado de esfuerzo que debemos hacer, para modificar la situación en la que nos encontramos en cuanto a sociedad digital y conectividad.”, resaltando la precariedad en ese sentido en países como Perú, donde solo el 33% de la población tiene acceso a internet.
Así, otros limitantes del futuro digital, tienen que ver con el desarrollo de agendas digitales de salud que requieren esfuerzos coordinados con los gobiernos de turno, como lo comentó el especialista del BID. Otro obstáculo va ligado a los recursos de infraestructura que refieren a la conectividad, teniendo en cuenta los índices de la región, donde hay brechas grandes en zonas rurales y urbanas. Asimismo, la incertidumbre ética y consideraciones legales constituyen otra barrera, ya que, aunque la región ha tenido avances, surge la duda de la capacidad de implementar correctamente esta transformación digital. Además, la capacitación de recursos humanos, tanto de médicos como de informáticos, con conocimientos de informática de salud también representa un reto para la región.
En ese sentido, los retos y limitantes de la transformación digital de la región fueron resumidos en seis, de acuerdo con Luis Tejerina: Desarrollo de agendas digitales de salud, recursos e infraestructura, eliminación de incertidumbre ética y consideraciones legales, construcción de estándares comunes de interoperabilidad, recursos humanos capacitados e integración regional.
Balance
De la misma manera, los expertos dieron respuesta a preguntas como, ¿Quién debe pagar por la digitalización?, realizadas por los espectadores. Frente a esto, Tejerina resaltó que la inversión para cerrar brechas debe ser un gasto de toda la sociedad, donde tanto el sector público como el sector privado tendrán que hacer su parte. Además, es necesario tener en cuenta las particularidades, ya que cerrar las brechas en Uruguay, un país con buenas dinámicas de salud digital, no es lo mismo que hacerlo en Paraguay u Honduras, países con zonas rurales de difícil acceso.
Frente al impacto de la telemedicina en asociaciones público-privadas, otra inquietud expuesta, se comentó que se deben realizar más estudios; sin embargo, la limitada evidencia demuestra que los resultados de las asociaciones son favorables, comentó el especialista del BID. En ese mismo sentido, el exministro de Perú destacó que particularmente en el caso peruano, el marco normativo ha avanzado para dar oxígeno a la salud digital; sin embargo, aspectos como la volatilidad de la gobernanza con los cambios de mandato, han afectado las decisiones tomadas, lo cual supone un aspecto a mejorar.
Con esto, se concluye que en la actualidad la tecnología tiene la capacidad de marcar una diferencia en la prestación de servicios de salud, ya sea a través de consultas virtuales, telemedicina o entrega directa de soluciones y productos de salud al paciente. Sin embargo, transversal a este avance, es necesario tener en cuenta las condiciones socioeconómicas de la región, las brechas de acceso y las particularidades normativas de cada país, para que este futuro digital no deje a ningún paciente de la región por fuera.
La telemedicina se convirtió en la mejor opción para continuar con la comunicación entre pacientes y personal de salud. Es por ello por lo que se firmó el convenio público-privado entre el Ministerio de Salud (MINSA), Smart Doctor y ALAFARPE.
Smart Doctor, es un aplicativo de telemedicina que puede instalarse en cualquier dispositivo móvil o PC. Desde el inicio de este convenio a fines de marzo, el aplicativo fue descargado por 40 mil usuarios y ha logrado conectar, a través de teleorientaciones, a más de 16 mil pacientes con médicos de diversas especialidades.
* La información contenida en este documento es un resumen del webinar que retrata la perspectiva de los expertos y no necesariamente refleja los puntos de vista, pensamientos u opiniones de FIFARMA o sus miembros. Cualquier contenido proporcionado por nuestros expertos es de su opinión y no tiene la intención de difamar a ninguna religión, grupo étnico, club, organización, empresa, individuo, ni a nadie, ni a nada.
Fuentes
Salud digital: un recorrido por el futuro del sector
Innovación: beneficiando los sistema de salud, la industria y los pacientes